
Increíble pero, lamentablemente, cierto como los hechos lo han venido a demostrar, pues menos mal que ha trascendido pues si no, imaginen. Y mientras los amigos de la virtud del cobro al estilo de los famosos: cobrador del torero, el moroso nos lo paga, el cobrador flamenco, se inventan el cobrador “republicano”, y como no se les ocurre ningún argumento medianamente serio que defienda esa postura, van y encienden el ventilador desviando la atención al ya famoso, y ahora recurrente, 3%, menudo juego que les da.
En un país democrático y serio sólo existiría una salida para esto: dimisiones y más dimisiones. Mientras los gobiernos catalán y central siguen apoyados en estos señoriítos de la recaudación ¿también les cobrarán algo?, y por supuesto sin investigar nada, no vaya a ser.
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