Lo de este gobierno es evidentemente la historia de un despropósito. Navega por la irresponsabilidad, por la sin razón y por la improvisación como aquel que acude a un quiosco a comprarse un caramelo y se quedá tan ancho.
Un jueves se reúne el Consejo de Ministros, se adoptan medidas contra la crisis a la que nos ha llevado la irresponsabilidad de un presidente que debiera pensar por el bien de España en su pronta jubilación, se espera al BOE de 4 días después, el lunes 24, para publicar el Real Decreto de “medidas extraordinarias para la reducción del déficit público”, y entre ellas se incluye una “impopular” entre los alcaldes que impedía acudir a operaciones de crédito a largo plazo a los Ayuntamientos, y claro se montó el revuelo. Bastaron unas horas para que Zapatero reculase, para que utilizando un método poco digno políticamente se cambiase absolutamente el criterio político de una medida, una corrección de errores del BOE del día siguiente modifica el sentido de un precepto y de una medida. Zapatero con esta forma de actuar sólo reconoce que: es rehén de su partido al que primero no consulta pero que a la vista de las reacciones hace caso; es um improvisador nato, no tiene rumbo, hoy le vale el blanco y mañana el negro sin el menor de los sonrojos; y es un presidente que se corrige a si mismo, hoy creo en una medida, por la tarde la cambio y al día siguiente la corrijo en un Boletín, un boletín que por otro lado contiene las normas principales del país y que se utiliza como si de un folleto publicitario se tratase con una fe de erratas. Que no intenten manipularnos ni engañarnos, pasaron 4 días para la redacción del Real Decreto y supongo que el mismo estaría redactado en su mayoría cuando se llevó en jueves y 20 al Consejo de Ministros, ¿por qué se oculta durante 4 días?, ¿por qué se rectifica cuando le cogen con el paso cambiado? ¿con qué amenazaron al presidente del desgobierno para que claudicase? ¿cómo se piensa que una medida es necesaria y se cambia en unas horas?.
La situación sólo puede conducir a un adelanto electoral a que la ciudadanía hable y se vea que a pesar de la oscuridad y de la improvisación de Zapatero y los socialistas hay ideas, hay alternativas y lo que es más importante hay futuro para España, un futuro que no puede capitanear alguien que no sabe navegar y que se dedica a dar bandazos.
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